Russelvfjellet

Lyngen es la tierra prometida, un lugar de sueños y expectativas donde dar rienda suelta a la imaginación con ascensiones mágicas.

Para llegar a este paraíso de nieve y montaña deberemos ser engullidos por el dragón del mar que en sus entrañas nos transportará a la tierra soñada, atravesando aguas frias y quietas que nos auguran una paz que no encontraremos al deslizarnos  por sus blancas laderas.

Una vez en esta tierra maravillosa sólo va a quedar escoger entre los muchos destinos  y retos que nos esperan, nosotros hemos escogido uno sencillo pero de una belleza  grande que nos permita adorar con calma este paisaje.

Pero antes nos tomamos nuestro tiempo para no dejar nada olvidado y así poder recordarlo cuando lo añoremos.

Otra vez la montaña nos permitió su visita y nosotros con humildad hemos acariciado sus laderas  intentando no molestarla con nuestras ansias de cabalgar sus blancas pendientes.  

 La cima sólo es la excusa para poder honrar  las montañas.

El Track.

La reseña.